domingo, 9 de septiembre de 2012

Cuando me muera...

Símplemente habré dado tanto por culo que moriré tranquilo. Hay tanto por lo que luchar que es más sencillo callar y eso es lo que me preocupa, el silencio. PEro tendré tanto que contar, que sentiré que mi vida, con sus altibajos habrá merecido tanto la pena. Este mundo es un regalo, no sabemos qué cojones hay dentro del envoltorio, pero ante todo, seguiré luchando y viviendo y si en otro lar no llego a nada, otra nada será como bien dijo Saramago.